Descripción
PROGRAMA DE ITINERARIOS CULTURALES «MADRID, CIUDAD PROGRESIVA»
Con el programa «Madrid, ciudad progresiva» nos proponemos rastrear historia, arte, cultura, geografías urbanas y humanas, presentes y pasadas, de nuestra ciudad.
Madrid es un poliedro de muchas facetas y, para conocerlo, es necesario desglosarlo por épocas, por barrios, por lugares representativos, y lo haremos progresivamente.
Medina emiral, villa cristiana, capital de Habsburgos y Borbones, ciudad castiza y moderna, poblada por los genios del Siglo de Oro o de las generaciones del 98 y del 27, alzada en armas el Dos de Mayo.
Madrid es tan diversa que para referirnos a ella hablamos aún de «los Madriles».
Una urbe reinventada tantas veces que hay que tomarla por partes para comprenderla, ese es nuestro objetivo con este programa.
Puede descargar el dosier general de este proyecto de Vademente cliqueando AQUÍ para conocer más.
También te invitamos a ver el vídeo de presentación en nuestro canal de YOUTUBE.
MADRID INDUSTRIAL I. MERCADOS, ARTESANOS E INDUSTRIAS
Desde mediados del siglo XIX el proceso de industrialización fue tomando asiento en España. El Liberalismo político había acabado con el Antiguo Régimen. Ahora le tocaba el turno a la economía y, en consecuencia, a la sociedad tradicional y a sus formas de vida.
Madrid no sufrió un proceso de industrialización tan agresivo como otras ciudades españolas, como Bilbao o Barcelona. Pero la industria local, heredera del artesanado tradicional, fue transformándose en moderna a través de la mecanización y los nuevos sistemas de trabajo.
Los viejos oficios se modernizaban en paralelo a los avances tecnológicos. Pero no era una cuestión de herramientas. Era un cambio estructural que incluía a las formas de vida, al consumo moderno, a los nuevos sistemas financieros y de comercio, a los nuevos medios de transporte. Un sin fin de elementos que iban alumbrado el mundo en el que hoy vivimos.
El crecimiento demográfico extraordinario que se produjo aumentó la demanda de todo tipo de bienes a todos los niveles sociales. También implicó el comienzo de los ensanches urbanos y la construcción de la nueva arquitectura que requería de materiales modernos, y en abundancia.
Si Madrid fue siempre una ciudad administrativa, de Estado, y no una metrópolis industrial proyectada a satisfacer una demanda nacional, si tuvo que atender a su propia demanda y a la de su área de influencia.
Además, como centro político y gran mercado urbano, necesitaba infraestructuras de transporte capaces de atender aquel trepidante mundo nuevo. El ferrocarril de contorno, entre la Estación del Norte y la de Atocha, transformó para siempre el paisaje sur de la ciudad.
El sur, donde siempre estuvieron las clases trabajadoras, que ahora ya podemos empezar a llamar proletarias, fue el lugar donde se mantuvo y evolucionó aquel mundo de artesanos y mercados de materias primas o manufacturadas de primera necesidad.
Si al norte de la Real Cerca crecían los ensanches de Chamberí, Arapiles o Argüelles, cuando la cerca del sur se derribó crecieron las fábricas, aparecieron los trenes y las grandes estaciones y viviendas de todo tipo, incluidas las más miserables.
Nuestra propuesta sobre el Madrid industrial de finales del siglo XIX y principios del XX tiene como escenario el territorio comprendido entre la Puerta de Toledo, Embajadores, Arganzuela y Delicias.
Un mundo de casas proletarias y poblados marginales, de fábricas pequeñas y medianas de todo tipo, de trenes y trajines, y fiel espejo de los terribles desequilibrios sociales que trajo aquella transformación, pero también de su progresiva mejora.
En nuestro primer itinerario recorreremos el sur de la Real Cerca desde la Puerta de Toledo hasta Embajadores.
Una zona de tradición manufacturera y de mercado, dentro de la Cerca, que sirvió de base al crecimiento industrial posterior, fuera de la Cerca.
Ya Carlos III había hecho un uso industrial del suelo de este barrio, el mejor ejemplo es la «Tabacalera», un imponente edificio industrial del siglo XVIII, luego llegaría el Gasómetro, las fundiciones metalúrgicas y un largo etc que han legado a esta zona de la ciudad un extraordinario patrimonio arquitectónico y cultural.
+ ITINERARIOS Y VISITAS POR MADRID
Escondido en Madrid, tesoros artísticos conservados
Un programa de visitas educativas para descubrir cómo, a pesar de grandes pérdidas, la ciudad de Madrid aún conserva un extraordinario y poco conocido patrimonio de arte sacro. Cliquea AQUÍ para conocerlo.
Explorando la Comunidad, más allá de la gran ciudad
Un programa de itinerarios culturales para descubrir la Comunidad Autónoma de Madrid. Más allá de la gran ciudad hay un rico mosaico de comarcas, tradiciones, historia y arte por explorar. Cliquea AQUÍ para conocerlo.
INFÓRMATE
Te sugerimos suscribirte a nuestra lista de correos para recibir información sobre el resto de convocatorias de actividades por Madrid.
Francisco Javier Gómez Puyuelo (propietario verificado) –
De la mano de Diego Blanca redescubrimos el Madrid de la puerta de Toledo , El Rastro y Embajadores y su adaptación a los nuevos tiempos de finales del siglo XIX y principios del XX. La ciudad evoluciona y se van generando modernos centros de producción y servicios ciudadanos que han dejado huella en el entorno urbano, huella que el profesor Diego Blanca va desvelando con delicadeza y erudición, iluminando la ciudad a nuestro paso con la luz de la historia: Matadero, mercado de pescado, gasómetro, ferrocarril, electricidad, transformaciones urbanísticas, puericultura , educación, fábricas publicas de estancos y privadas todo tipo, parque de bomberos, jardines reales, … Estos paseos con el Maestro no tienen parangón y sin dudarlo los califico con 5 estrellas, las mismas que tenía el parador de Gilimón, también famoso por sus dos hijas (pollas en lenguaje de la época). Pero eso es una anécdota para otro día.
Miguel García-Escudero Larrea (propietario verificado) –
Aunque el título de la actividad no me parecía muy atractivo, sabía que, yendo de la mano de Diego, no me iba a defraudar y así efectivamente ha sido.
Nos s ha llevado por el Madrid industrial incipiente y decadente del siglo XIX y XX acompañados de numerosas fotografías de la época y planos explicativos de las modificaciones sufridas, haciéndonos pasar, cómo siempre, una jornada amena, ilustrativa e interesante.